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Era notable en la Corte como èste hombre mostraba su orgullo y cinismo ante sus víctimas para quienes no tuvo ningún remordimiento. 
Espinal,negoció con las autoridades judiciales para recibir una condena menos severa,ya que por los cargos en su contra pudo ser condenado hasta a 25 años,trató hasta el último momento de presentar argumentos de salud,entre ellos condición de presión arterial alta y cáncer de próstatico para evadir la cárcel lo cual fuè denegado por el Juez que dictó la sentencia previamente acordada en días anteriores con el sentenciado.
Las acusaciones se redujeron a robo a gran escala en tercer grado,falsificación en segundo grado, conspiración por defraudar en primer grado y practicar la abogacía sin estar autorizado.
Espinal,de 59 años,admitió su culpabilidad ante el juez Michael J. Orbus,de la Corte Criminal de Manhattan, luego de arribar a un acuerdo con el fiscal Cyrus Vance.
Según el expediente,las víctimas de Espinal fueron hispanos inmigrantes que buscaban legalizar su estatus migratorio en los Estados Unidos a quienes les cobraba altas tarifas por prestar sus servicios legales,los cuales oscilaban desde los $3.000.00 (tres mil dolares) en adelante.
El acusado se encontraba en libertad condicional bajo fianza de 25 mil dólares.
Las autoridades fiscales continuarán persiguiendo los casos de fraude de inmigración en todo el Estado de Nueva york,incluyendo a falsos abogados e instituciones sin fines de lucro que cobran dinero a los inmigrantes,quienes son estafados en su afán de poner en ordensu estatus migratorio.
Otros casos a mencionar son los de la Fundación Internacional del Inmigrante y la Federación de Inmigrantes de América,presididas por Eduardo Juárez y Estela Figueredo,respectivamente.Ambas instituciones enfrentan casos judiciales por ofrecer servicios de inmigración sin autorización para ello,además de cobrar determinadas cantidades de dólares a los inmigrantes.
El fiscal Vance dijo en oportunidades recientes que la Fiscalía trabaja diligentemente para perseguir y prevenir los fraudes que tienen como objetivo a la comunidad inmigrante,pues dar consejos legales sin licencia,especialmente a víctimas vulnerables,no solamente es inaceptable sino que es un crimen.Dijo que èste comportamiento deshonesto e irresponsable afecta desproporcionadamente a la comunidad inmigrante, por lo que no puede ser tolerado.
Espinal ejerció durante 17 años como abogado de inmigración sin estar registrado como tal,daba conferencias de inmigración e incluso fundó la Asociación de Abogados Dominicanos en Nueva York.
